Un payaso es arrojado por fe a deambular
viéndonos con la cabeza en las rodillas
en las líneas de su imperfecto maquillaje
y en sus zapatos
la Pasión de ser mendigo.
Por su mejilla corre un blanco sudor
que llega hasta sus guantes podridos en el uso
de aquella flor marchita en su falsedad.
Las veredas en las agrietadas son un hilo al suelo
/////////////////////////////////////simulando cuerdas flojas
Su circo son los rieles de un tren
que podría ser un paso de cebra domesticada
su corbata es horca.
Un payaso triste hace estallar una carcajada
en la Tierra del fuego*
el siete del siete del año siete**
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*En Londres
**siete de julio de 2005
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